La cueva de los tertulianos

Crónica en primera persona de la tetulia celebrada en el Hotel Boulevard para Onda Vasca, El cantón de Gasteiz, el jueves 17 de noviembre de 2010.

Hoy hemos cambiado de escenario con lo que la emisora ni pisarla. Seguro que alguna nos sigue teniendo guardada la caja de bombones que garantiza el viaje fin de curso de su hijo (lo de estudios hace tiempo que dejo de ser siquiera un nombre). Antes de iniciar nuestros debates hemos sido condenados a escuchar el off the record del tal sostres autor inpectore de prolongados desastres de palabras, así­ que nuestro amigo y contertulio Javier apenas ha podido contarnos su periplo por el mediterráneo. Ya lo hemos emplazado para una detallada rueda de prensa, off the record, por supuesto.

Arrancado que hemos la tertulia propiamente dicha hemos arrancado coincidiendo en lo impresentable del sujeto. El amigo Eduardo ha introducido un elemento que a las audiencias locales les resulta más lejano y que no estarí­a de más explicar algún dí­a. Ha aclarado que las declaraciones no son realizadas on line, sino que son la filtración interesada de un determinado grupo, que creo recordar que ha identificado con UGT, de una grabacion hecha, por así­ decirlo, a traición. A mi me parece que eso en este caso carece de relevancia. Tengo mis dudas sobre si la conversación, en un plató y delante de público puede considerarse privada, pero de lo que no tengo duda es de que es lo que en ciencias de la información llamarí­amos informativamente relevante, y lo es en el sentido de que destapa y pone a las claras el verdader cariz de un tertuliano de una cadena pública. He señalada también, al hilo del comentario sobre la ausencia de reconvenciones o protestas del resto de tertulianos, en que lo que me ha llamado la atención son las palabras de la presunta moderadora incapaz de moderar al inmoderado diciendo aquello de… a mi hija no te acerques, como si el resto de las mujeres más o menos jóvenes del planeta y hasta las niñas no tuviesen padre y madre o en todo caso su situación poco le importase a ella. Enzarzados que nos hemos en cuestiones colaterales relativas a lo que es o no delito y a si la fiscalí­a debe o o intervenir, mi impresión es que la primera en intervenir o visitar un psicólogo es la esposa del interfecto, claro que, tal como están las cosas, mientras no le egue es mayormente problema suyo. Tras aceptar fiscalí­a como animal de compañí­a hemos cambiado de tercio, aunque casi se puede decir que ya era tarde, las declaraciones de los altos cargos de diputación se nos han quedado fuera…

He sido invitado a exponer mi tesis sobre el uso revolucionario del tabaco que me inspiró Pají­n, que plasmé en un apunte anterior y que causo gran regocijo en los tertulianos. El director del hotel, sumado a la tertulia ha indicado sabiamente un input más que puede desequilibrar la balanza del ingreso y el gasto… se trata del ahorro que suponen al inserso las muertes prematuras de los fumadores con el consiguiente ahorro en pensiones. Habrá que tenerlo en cuenta.

Nos hemos metido entonces con el tema de los ocho millones de euros que el ayuntamiento debe al gobierno vasco y para cuyo pago, según parece, ha ido tirando de allí­ y de aquí­. Hemos coincidido todos en lo poco que queda de la seriedad aquella de los presupuestos. yo por mi parte he indicado que me alegra que por fin podamos los de letras hablar de estas cosas porque cada vez tienen más de cuentos y menos de cuentas. He trasladado la reflexión que me hací­a un amigo en el sentido de que tiene razón el eqeuipo de gobierno al pedir tranquilidad. Los presupuestos son como las pelí­culas, la gente no se muere de verdad, bambi eran solo dibujos, realmente nunca existió su madre y or tanto nunca la mataron. con ese mismo espí­ritu hemos de afrontar los presupuestos públicos. Por otra parte, y con la complejidad creciente de la economí­a y sus triquiñuelas, uno se pierde en estos debates entre partidas, ampliaciones de crédito, amortizaciones, etc. etc. etc. La gente al final pregunta aquello de pero están los millones o no. si no están es grave el descuido, si lo están lo es la acusación. En fin, que todos hemos coincidido en que efectivamente flata trasparencia que es, como muy bien ha explicado el otro javier, la difusión de información de forma clara y comprensible.

En estas estábamos cuando ha dado la una y amablemente nos han invitado a librar los micros e irnos al bar, indirecta que hemos captado y remojado con un buen crianza. El jueves que viene más…

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