Definitivamente se me hace raro esto de que sea lunes y no tenga columna que escribir. Pero es lo que tiene el verano. Todos los años igual. Todos los años la misma contradicción. Cuando la gente tiene más tiempo es cuando menos mejora la oferta para ver, oir o leer. No es tanto por mi caso, un humilde aprendiz en proceso de ir dominando el arte de la columna. Pero si que ocurre con muchos de los programas que vemos. Se van de vacaciones y nos quedamos con los becarios. Porque no es por nada, pero parece que los que se van tuvieran miedo de que al volver su sitio estuviese felizmente ocupado y en base a ese criterio eligen a sus sustitutos. Es como si buscasen que les echásemos de menos.
Yo lo que echo de menos es el deber y la obligación que me ocupaba estas matinales del lunes en las que pocas ganas se tienen de hacer mucho, ni poco,ni prácticamente nada. Algo tendré que hacer para mantener el pulso y hasta la costumbre. Pero como díría alguien a quien no se llevó el viento… ya lo pensaré mañana…
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